miércoles, 20 de noviembre de 2024

Conclusión

"La mujer es la primera y más grande guerrera, pero su batalla siempre ha sido luchada en las sombras." 

– Maya Angelou.

Sin duda después de la investigación que lleve a cabo al escribir este blog, me doy cuenta de lo mucho que la sociedad nos ha echo dejar de lado a la mujer, incluso el sistema educativo nos ha privado de el conocimiento sobre su historia, desctacando a el hombre, mismo hombre que veía a la mujer como un ser inferior y una falla, como Mary Wollstonecraf  lo expreso cuando dijo: "Aristóteles dijo que la mujer es un hombre incompleto. Lo que él no entendió es que la mujer es un ser completo y único, no una sombra de lo que puede ser un hombre." 

Me parece impensable el como aun despues de tanto tiempo, tantos avances, y descubrimientos, aun hay personas que mantienen esta misma ideologia, cargada de misoginia y desinformacion.

"Las mujeres dan vida, los hombres la quitan"

-Karina Pacheco

Me gustaría hablar de este libro como mi ultimo aporte a usted que me lee, este es un relato que aborda las experiencias de diversas mujeres en la sociedad contemporánea, mujeres que debieron confrontar los roles tradicionales impuestos por esta sociedad en la que vivían, el como a través de su escritura, la autora denuncia cómo las estructuras sociales históricamente han relegado a la mujer, a menudo subordinándola a la figura masculina, como si esta mereciera mas respeto, poder o reconocimiento únicamente por su genero.

El título del libro como podemos notar resalta la paradoja de cómo las mujeres, al ser responsables de la procreación y la creación de vida, son también las víctimas de un sistema que les priva de libertad y las somete a diversas formas de violencia, incluidos los llamados feminicidios, que si, aun somos asesinadas únicamente por el hecho de ser mujeres, aunque la sociedad trate de ocultarlo o minimizarlo. Pacheco explora temas como el sufrimiento, la injusticia social, la opresión, pero también celebra la resistencia y lucha femenina, la capacidad de las mujeres para generar cambios, y cambiar por si mismas su propia historia.

Cada historia dentro del libro es un retrato de cómo las mujeres, a pesar de las adversidades, y retos a los que son sometidas, incluso teniendo que ser llamadas un "grupo vulnerable" siguen adelante y siguen dando vida en diversos aspectos, ya sea en la maternidad, el trabajo o la lucha por sus derechos.

El simple hecho de por fin haberme atrevido a escribir este blog me parece un gran avance, debido a que incluso aunque siempre he pensado en esto y he tratado de defenderlo, nunca me había decidido a exponer mi ideología de esta forma, espero que usted que me acompaño a lo largo de estos textos también se atreva, atrévase a defender lo que usted piensa y lo que usted cree, y sobre todo, no deje que el silencio siga marcando su historia.

"La guerra no tiene rostro de mujer"

“La historia está escrita por los vencedores, pero también por los hombres. Y las mujeres, que han luchado a lo largo de la historia, no son sino las olvidadas en sus relatos”

-Virginia Woolf

Me frustra profundamente pensar en cómo las mujeres han estado involucradas en las guerras, luchando, sufriendo, sacrificándose, pero su historia ha sido minimizada o completamente borrada ¿Cómo puede ser que, a lo largo de la historia, sus contribuciones se hayan ignorado de manera tan descarada? Las mujeres no solo han estado al margen de la guerra, como si solo fueran víctimas de los conflictos, sino que han sido activas, han luchado, han sido guerreras, espías, enfermeras, lideresas... y, sin embargo, se las ha reducido a un papel secundario, casi invisible, como si su sufrimiento y valentía no tuvieran el mismo valor que el de los hombres. Y no es que esta invisibilización sea algo del pasado, es algo que sigue sucediendo hoy.

Mujeres como Charlotte Corday, por ejemplo, que se infiltró en las filas revolucionarias en Francia durante la Revolución Francesa y asesinó a Jean-Paul Marat, un líder radical, con la esperanza de acabar con la violencia. Su acto, aunque discutido, fue una intervención radical, de gran valentía, pero ¿quién recuerda su nombre hoy en día? ¿Cuántas veces hemos oído hablar de ella en comparación con los grandes nombres de la Revolución? ¡Es tan injusto! El sacrificio y las decisiones que tomaron esas mujeres no están siquiera en las mismas páginas de los libros de historia. Las mujeres no solo estuvieron en casa esperando a que los hombres volvieran; muchas estuvieron en el campo de batalla, ocultas en las sombras de la historia.

Otra figura clave es Lyudmila Pavlichenko, la famosa francotiradora soviética que luchó en la Segunda Guerra Mundial. ¿Cómo es posible que no se haya dado el reconocimiento que merece? Lyudmila fue una de las francotiradoras más exitosas de la historia, con 309 muertes confirmadas, pero ¿cuántas veces hemos oído hablar de ella en comparación con otros héroes de guerra masculinos? Es como si sus hazañas se minimizaran, como si el hecho de ser mujer hiciera que su valentía no tuviera el mismo peso. Es un reflejo de una sociedad que aún no está dispuesta a reconocer el impacto real de las mujeres en la historia, especialmente en los momentos más cruciales.

Y luego están las mujeres que fueron utilizadas como armas de guerra, como las mujeres de confort durante la Segunda Guerra Mundial, que fueron forzadas a servir a los soldados japoneses en campos de prostitución militar. A estas mujeres se les robó su dignidad, su libertad, y se las condenó a vivir una pesadilla indescriptible. Muchas de ellas fueron completamente ignoradas, como si sus cuerpos no tuvieran valor, como si su sufrimiento no fuera tan importante como el de los hombres que peleaban en el frente. Lo peor es que ni siquiera fue hasta mucho tiempo después que las voces de algunas de estas mujeres comenzaron a ser escuchadas, aunque la justicia nunca llegó completamente. Es tan doloroso y tan profundamente injusto.

Y, ¿qué pasa con las mujeres que fueron espías? Mata Hari, por ejemplo, es una de las figuras más famosas en este campo. Fue una bailarina exótica y espía durante la Primera Guerra Mundial, y, aunque sus logros fueron impresionantes, su historia ha sido constantemente distorsionada y usada en su contra. Su imagen ha sido desfigurada en la cultura popular, reducida a una femme fatale, sin un reconocimiento real de sus contribuciones en la guerra. Es increíble cómo se las utiliza para cumplir con ciertos estereotipos, sin darles el crédito que merecen.

Pensar en el como los historiadores por siglos decidieron borrarlas de la historia, y como aun puede que haya habido muchísimas mas que ellos decidieron ignorar es algo realmente frustrante, y es que si, las mujeres han estado allí, en todas las guerras, no solo como víctimas, sino como fuerzas activas que influenciaron el curso de los acontecimientos. Pero sus historias han sido borradas, minimizadas y, en muchos casos, nunca se les ha dado el reconocimiento que deberían haber recibido.

Este patrón de invisibilización no solo es frustrante, es un reflejo de una sociedad, sociedad que en cada una de las veces que he hablado acerca de los derechos de la mujer y el como la historia decide dejarlas en el olvido, me repite que: "Seguro no hicieron nada importante y por eso no es relevante hablar de ellas". 

Es una gran injusticia que debe ser reconocida y corregida, la historia de la guerra no puede ser completa sin las historias de las mujeres que estuvieron allí, luchando, resistiendo, sobrevivendo y, a menudo, sacrificándose mucho más de lo que nos imaginamos.

"Derechos del hombre y del ciudadano": Los derechos humanos tienen un inicio misógino

"La igualdad es un derecho de los hombres, pero no de las mujeres, porque ellas no pueden ser consideradas iguales a los hombres."

-Jean-Jacques Rousseau

Revolución Francesa es recordada como un momento de transformación radical en la historia, donde la lucha por la igualdad, la libertad y la fraternidad marcó un antes y un después en la organización social. Sin embargo, esa igualdad proclamada fue, desde el inicio, selectiva. Mientras los hombres luchaban por abolir los privilegios de la nobleza y el clero, las mujeres que alzaron su voz para incluirse en este nuevo contrato social fueron, en el mejor de los casos, ignoradas y, en el peor, perseguidas y eliminadas. Este es el caso de Olympe de Gouges, una mujer cuya valentía y claridad intelectual la llevaron a redactar la *Declaración de los Derechos de la Mujer y la Ciudadana*, enfrentándose al orden establecido con una firmeza que pagó con su vida.

Olympe de Gouges, nacida en 1748, creció en un mundo donde las mujeres estaban relegadas al espacio doméstico, consideradas intelectualmente inferiores y legalmente invisibles. Durante la Revolución Francesa, cuando el pueblo exigía cambios profundos, ella vio una oportunidad para cuestionar las estructuras patriarcales que limitaban a las mujeres. La *Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano* de 1789 fue un manifiesto poderoso, pero excluyente. Al no incluir explícitamente a las mujeres, reflejaba las contradicciones de una revolución que prometía igualdad mientras perpetuaba desigualdades fundamentales.

De Gouges respondió en 1791 con su *Declaración de los Derechos de la Mujer y la Ciudadana*, un texto que desafiaba la lógica patriarcal del momento. En él, argumentaba que las mujeres no solo eran iguales en derechos a los hombres, sino que su exclusión del ámbito político y social era una forma de opresión incompatible con los ideales revolucionarios. Su declaración comenzaba con un llamado directo: "Mujer, despierta; el toque de la razón resuena en todo el universo: reconoce tus derechos". En este documento, no solo pedía el derecho al voto, sino también igualdad en el acceso al trabajo, la educación y la participación política. Fue, en esencia, un grito de justicia para todas las mujeres que habían contribuido a la Revolución pero que seguían siendo ignoradas en sus frutos.

Su activismo no se limitó a las palabras. De Gouges denunció públicamente las injusticias, apoyó causas sociales y abogó por reformas como la abolición de la esclavitud. Sin embargo, su osadía la convirtió en un objetivo. En una sociedad en transición, donde incluso los hombres enfrentaban resistencia al cambio, una mujer que exigiera igualdad era percibida como una amenaza radical. En 1793, durante el período del Terror, fue arrestada bajo la acusación de traición. Su lucha por los derechos femeninos y su oposición a Robespierre y a la facción jacobina fueron utilizadas como excusas para silenciarla.

El 3 de noviembre de 1793, Olympe de Gouges fue guillotinada. Sus últimas palabras, según los relatos, fueron un desafío al poder que intentaba borrarla: "Hijos de la patria, vengaréis mi muerte". Su ejecución no solo marcó el fin de una vida dedicada a la justicia, sino que también simbolizó la resistencia que enfrentaron las mujeres en su lucha por ser reconocidas como ciudadanas plenas.

Al reflexionar sobre Olympe de Gouges y su legado, me doy cuenta de la hipocresía de estos hombres quienes alardeaban sobre su lucha por la igualdad, pero en realidad eran sumamente ingustos, practicamente diciendo que si, los hombres son y deben ser tratados como iguales, pero las mujeres no, y no merecen de ninguna forma el mismo trato. Su historia evidencia cómo las mujeres han sido activas constructoras de los movimientos sociales y políticos, incluso cuando su participación ha sido sistemáticamente negada. Más allá de su trágico final, su pensamiento sigue siendo relevante porque nos recuerda que la igualdad no se concede; se exige y se construye con valentía. Olympe de Gouges nos dejó una lección que resuena hoy: ninguna revolución está completa mientras la mitad de la humanidad siga siendo excluida de sus promesas.

Cambiaron el mundo, pero no la historia: Mujeres en la ciencia y la tecnología

"Nunca dejes que nadie te diga que no puedes hacer algo."

-Katherine Johnson

Al hablar de mujeres que revolucionaron la ciencia y la tecnología, no puedo evitar sentir admiración por aquellas que, a pesar de los obstáculos, dejaron un impacto duradero. Lo más impresionante es cómo sus descubrimientos, fundamentales para la tecnología moderna, fueron ignorados o atribuidos a otros en su momento. Aquí quiero destacar a algunas de ellas, cuyo trabajo merece un lugar destacado en nuestra memoria colectiva.

Pioneras olvidadas y sus legados

  • Rosalind Franklin 

Es quizás uno de los casos más emblemáticos. Su habilidad para obtener imágenes precisas del ADN mediante cristalografía de rayos X fue esencial para el descubrimiento de su estructura helicoidal. La famosa "Foto 51", clave para este avance, no solo permitió a Watson y Crick formular su modelo, sino que marcó el inicio de la biología molecular moderna. Lo que duele es cómo se le negó el crédito en vida, a pesar de que su trabajo es el cimiento de técnicas genéticas actuales como la edición de genes.

Menos conocida:

  • Margarita Salas

Bioquímica española, revolucionó la genética con su trabajo sobre la ADN polimerasa del bacteriófago phi29. Esta enzima amplificadora permite obtener grandes cantidades de ADN a partir de muestras mínimas, un proceso ahora esencial en estudios genómicos y pruebas forenses. Su invención fue patente en Europa y EE.UU., mostrando que su impacto trascendió fronteras.

Innovadoras en informática y tecnología

Aunque muchas conocen a Ada Lovelace, pocas han oído hablar de:

  • Frances E. Allen

Pionera en la optimización de compiladores. Su trabajo permitió que los programas informáticos fueran más rápidos y eficientes, algo que ahora damos por sentado en cualquier dispositivo digital. Allen fue la primera mujer en recibir el Premio Turing, pero su nombre sigue siendo desconocido fuera de los círculos especializados.

En un campo distinto pero igual de importante:

  • Stephanie Kwolek

Química polaco-estadounidense, inventó el Kevlar, una fibra resistente al calor y a la tracción utilizada en chalecos antibalas, cables submarinos y estructuras aeroespaciales. Su descubrimiento no solo salvó innumerables vidas, sino que también impulsó avances en la ingeniería de materiales.

Más allá de los límites terrenales

  • Katherine Johnson

Matemática afroamericana que calculó trayectorias para la NASA, fue clave para que las misiones espaciales, incluyendo el Apolo 11, llegaran a buen término. Aunque su historia se popularizó con la película Hidden Figures, aún no se dimensiona completamente la magnitud de sus contribuciones en una época donde el racismo y el sexismo limitaban las oportunidades para las mujeres de color.

Escribir sobre estas mujeres inevitablemente me inspira ya que todas enfrentaron sistemas que no solo subestimaban su talento, sino que activamente bloqueaban su reconocimiento. Al reivindicarlas, no solo hacemos justicia a su memoria, sino que también enviamos un mensaje claro: la ciencia y la tecnología nunca avanzan solas; siempre están impulsadas por mentes brillantes, muchas de las cuales fueron ignoradas simplemente por su género.

Mi titulo hace referencia a el como incluso con estos grandes descubrimientos que definitivamente ayudaron a cambiar el mundo, no fueron reconocidas en la historia; Creo que honrar sus historias no es solo un acto de justicia, sino también una forma de inspirar a futuras generaciones de científicas que aún enfrentan desafíos similares. Estas mujeres no solo transformaron sus campos; moldearon el mundo en el que vivimos hoy.

El lienzo como arma: Mujeres pintoras y su lucha por el reconocimiento

"Quiero pintar a mis modelos como seres humanos, no como objetos"

-Sylvia Sleigh

Ser pintora entre los años 50 y 90 fue una tarea desafiante y, a la vez, profundamente inspiradora. En un mundo artístico dominado por los hombres, las mujeres que optaban por la pintura no solo enfrentaban prejuicios sociales, sino que además debían demostrar una técnica impecable y una originalidad que a menudo era puesta en duda simplemente por su género. Sin embargo, muchas lograron trascender, dejando obras que no solo son técnicamente magistrales, sino también profundamente humanas y reflexivas.

Años 50 y 60: Técnica impecable y desafíos sociales

Las mujeres artistas de esta época tuvieron que lidiar con las expectativas tradicionales que las relegaban al ámbito doméstico. Para ser pintoras, muchas trabajaron en el anonimato o bajo seudónimos. Entre estas figuras destaca:

  • Evelyne Axell

Una pintora belga que exploró temas de sensualidad y modernidad, pero siempre con un enfoque técnico que combinaba lo figurativo con lo surrealista. Sus pinceladas limpias y su uso audaz del color le dieron un estilo distintivo.

  • De este período también es fascinante la obra de Isabel Bishop, quien se destacó por su realismo poético. Bishop retrataba escenas cotidianas en las calles de Nueva York, usando trazos detallados que capturaban la esencia del movimiento y la humanidad de sus personajes. Su técnica con el óleo era particularmente impresionante, ya que lograba texturas suaves y atmósferas que parecían suspendidas en el tiempo.


Años 70 y 80: Feminismo y profundidad técnica

Con el auge de los movimientos feministas, muchas mujeres encontraron en el arte una forma de protesta y exploración de su identidad. Aquí quiero destacar a:

  • Sylvia Sleigh
Una pintora realista británica que, en lugar de idealizar a sus modelos, retrataba a hombres y mujeres en poses íntimas y relajadas, desafiando las convenciones de la pintura de desnudos. Su dominio del retrato era excepcional; cada pincelada parecía cargada de intención, logrando texturas de piel y cabello que reflejaban una meticulosa observación.



Otra artista fascinante de esta época es:

  • Lois Dodd
quien dedicó gran parte de su obra a paisajes y naturalezas muertas, trabajando con una precisión casi fotográfica. Dodd usaba una paleta sobria, pero con detalles minuciosos que dotaban a sus pinturas de una serenidad casi tangible. La forma en que capturaba la luz natural es un testimonio de su profundo conocimiento de la composición y la técnica.



Años 90: El realismo como resistencia y expresión

Ya para los años 90, las mujeres pintoras comenzaron a ganar mayor visibilidad, aunque muchas seguían siendo reconocidas más por su género que por su talento. Una figura destacada en el realismo de esta época es:

  • Claudia Hart
Quien combina elementos tradicionales del retrato con un enfoque contemporáneo, integrando simbolismos complejos. Sus obras muestran un dominio del color y la forma que resulta hipnotizante.



En el mismo período, mi favorita:

  • Ann Gale 

Se centró en el retrato psicológico, con una técnica realista única que mezcla capas y capas de pinceladas diminutas. Esto crea texturas intrincadas y detalles casi palpables en la piel y el entorno de sus modelos. Gale es una maestra en representar emociones sutiles, mostrando una conexión profunda con sus temas.



Mi fascinación por estas pintoras

Lo que más me conmueve de estas artistas es su capacidad para capturar la esencia de lo humano a través de técnicas impecables. En cada obra se puede percibir no solo su dominio del color, la luz y la textura, sino también una valentía inmensa al plasmar temas que desafiaban las normas de su tiempo. Creo que hay algo profundamente inspirador en su búsqueda de autenticidad, incluso cuando el mundo parecía no querer reconocerlas.

Pienso en lo difícil que debió ser para ellas dedicarse a la pintura en un tiempo en el que todo estaba en su contra, y eso me llena de admiración. Sus pinceladas no solo cuentan historias; también llevan consigo un mensaje de resistencia y perseverancia. ¿Qué opinas tú? ¿Crees que estas luchas y logros siguen marcando la forma en que vemos el arte hoy?

martes, 19 de noviembre de 2024

Aristóteles y el género: ¿Razón o prejuicio?

"La relación del hombre a la mujer es por naturaleza una relación de superior a inferior y de gobernante a gobernado"

-Aristóteles

La visión de el hombre en el siglo IV a. C hacia la mujer  estaba cargada de misoginia, con pensadores tal relevantes en dicha época como Aristóteles afirmando la debilidad de la mujer, con afirmaciones como:

  • "El varón, a menos que se constituya en algún sentido contrario a la naturaleza, es por naturaleza más experto en liderar que la mujer"
  • "Pues igual que de seres mutilados unas veces nacen individuos mutilados y otras no, de la misma forma, de una hembra unas veces nace una hembra y otras nace un macho. Y es que la hembra es como un varón mutilado, y las menstruaciones son esperma, aunque no puro, pues no les falta más que una cosa, el principio del alma […] Las hembras son más débiles y frías por naturaleza y hay que considerar al sexo femenino como una malformación natural". 

Aun en nuestra época es complicado encontrar un libro de filosofía el cual no sea acaparado por los mismos filósofos, ya conocidos por todos, en cambio encontrar a una mujer citada en uno de esto o que simplemente se le mencione parece una tarea imposible, aun al hojear enciclopedias que aseguran ser una fuente de información completa para el lector, por tanto;¿Hubo filósofas?, si es posible, aunque como afirma Gilles Ménage en "Historia mulierum philosopharum" (Lyon, 1690): 

“No es que no hayan existido mujeres que filosofaran. Es que los filósofos han preferido olvidarlas, tal vez después de haberse apropiado de sus ideas”.

Constantemente solo sabemos de la existencia de mujeres filosofas por los escritos, o relatos de otros, por tanto la misma historia de las mujeres en la filosofía ya es en si una guerra, una guerra por no ser menospreciadas , por no ser vistas como seres sin raciocinio, por no tener que esconderse en el anonimato, y que el mundo pudiera entender que las mujeres también pensaban y que todo esto que fue afirmado por hombres vistos como "sabios" no era mas que desinformación, que no era cierta la afirmación :

"Por lo tanto, las mujeres son más compasivas y más fáciles de llorar, más celosas y llenas de molestias, cariñosas y más polémicas. La mujer también está más sujeta a la depresión de los espíritus y la desesperación que el masculino. También es más descarada y falsa, más fácil de engañar, y más atenta a las lesiones, más vigilante, más ociosa y, en general, menos excitable que el macho. Por el contrario, el macho está más dispuesto a ayudar y, como se ha dicho, más valiente que el femenino. Incluso en la malaria, si la sepia es golpeada con un tridente, el macho viene a ayudar a la hembra, pero la hembra escapa si el macho es golpeado"

Afirmar que las mujeres son "más compasivas, más fáciles de llorar, más celosas" o que están "más sujetas a la depresión y la desesperación" no solo carece de fundamento científico, sino que perpetúa ideas dañinas que limitan nuestra comprensión de las emociones humanas. Desde el punto de vista psicológico, los rasgos de personalidad no están determinados por el género, sino que se desarrollan a partir de factores individuales, sociales y culturales. Por ejemplo, el hecho de que las mujeres tiendan a expresar emociones como el llanto de manera más abierta no es una cuestión biológica, sino el resultado de normas sociales que fomentan este comportamiento. Por otro lado, los hombres son condicionados para ocultar sus emociones, lo que también limita su desarrollo emocional.

Desde una perspectiva científica, estudios recientes en neurociencia muestran que las diferencias entre los cerebros masculino y femenino son mínimas y no explican comportamientos específicos como la valentía o la facilidad de engaño. De hecho, muchas de las características atribuidas al género son influenciadas más por el entorno y la experiencia que por factores biológicos. Al igual que un edificio cuya estructura básica puede ser similar, es el entorno el que define cómo se utiliza y desarrolla esa estructura.

Biológicamente, afirmar que "las mujeres son más fáciles de engañar" carece de respaldo en estudios evolutivos. Durante siglos, hombres y mujeres han desarrollado roles complementarios para adaptarse a su entorno, pero esto no significa que un género sea superior al otro. La "compasión" o la "valentía" son respuestas humanas necesarias para la supervivencia, presentes en ambos géneros. Incluso el ejemplo de las sepias no es suficiente para extrapolarlo a los humanos, cuya complejidad psicológica y social supera cualquier comparación simplista con animales.

Sin duda las afirmaciones débiles de sustento de estos filósofos influyo significativamente en la sociedad de estos tiempos.

Hildegarda de Bingen y Anna Comnena son dos figuras que me inspiran profundamente, pues lograron brillar en una época en la que ser mujer significaba enfrentar grandes limitaciones.

Hildegarda de Bingen (1098-1179), nacida en el Sacro Imperio Romano Germánico, fue mucho más que una monja; era una visionaria que dejó huella en múltiples áreas, desde la música hasta la ciencia. Sus visiones místicas quedaron plasmadas en obras como Scivias ("Conoce los caminos"), mientras que su manera de entender la salud y la naturaleza sigue siendo impresionante por su enfoque adelantado a su tiempo.

Por otro lado, Anna Comnena (1083-1153), hija del emperador Alejo I Comneno del Imperio Bizantino, marcó un precedente al convertirse en la primera historiadora reconocida. Su obra La Alexíada no solo narra el reinado de su padre, sino que también refleja su profundo conocimiento de la filosofía y la literatura griega, además de la lucha entre sus aspiraciones y las barreras que enfrentó por ser mujer.

Ambas, desde contextos y culturas distintas, representan lo que significa desafiar las expectativas sociales y demostrar que el talento y la inteligencia femeninos trascienden cualquier límite impuesto. Para mí, sus historias son un recordatorio de cómo las mujeres han luchado por hacerse visibles y reconocidas a lo largo de la historia.

Hildegarda de Bingen sistematizó sus visiones en tres obras principales: 

  • Scivias ("Conoce los caminos del Señor"), escrito entre 1141 y 1141; 
  • Liber Vitae Meritorum ("Libro de los méritos de la vida"), redactado entre 1158 y 1163;  
  • Liber divinorum operum ("Libro de las obras divinas"), creado entre 1163 y 1174.

 En estas obras, describió detalladamente sus visiones antes de interpretarlas.

En Scivias, Hildegarda aborda seis visiones que exploran al Creador, la creación y las relaciones entre Dios, el cosmos y el hombre. El Liber Vitae Meritorum incluye siete visiones sobre la historia de la salvación, mientras que el Liber divinorum operum, el más extenso, recopila trece visiones centradas en el Espíritu Santo y la construcción del Reino de Dios. Este último culmina con visiones sobre el Juicio Final, la llegada del Anticristo y la creación de un nuevo cielo y una nueva tierra.

Además de estas obras místicas, Hildegarda desarrolló escritos sobre la “filosofía natural” y la música. En el ámbito de la medicina, escribió Physica o Historia Natural (también llamado "Libro de la medicina sencilla"), un texto sobre el uso de plantas, animales y minerales para la salud humana. Su obra Causae et Curae ("Libro de las causas y los remedios") examina las causas de las enfermedades y ofrece posibles tratamientos, destacando su enfoque en el cuerpo humano como un microcosmos dentro del macrocosmos de la creación.

En música y poesía, su obra más destacada es el Symphonia Armonie celestium revelationum ("Sinfonía de la armonía de las revelaciones celestiales"), escrita entre 1140 y 1150, que incluye 77 piezas musicales, un coro y un auto sacramental.

Hildegarda también mantuvo una extensa correspondencia, con más de 300 cartas dirigidas a figuras como el Papa Eugenio III, emperadores como Conrado III, y nobles como Felipe de Alsacia. Su intercambio epistolar con Bernardo de Claraval aborda cuestiones doctrinales y refleja un vínculo intelectual y afectivo significativo.

Otras contribuciones incluyen la Explicación de la Regla de San Benito, la Explicación de los Símbolos de San Atanasio, y una lengua "ignota", que aún no ha sido completamente descifrada. Sus manuscritos, con iluminaciones que la muestran en sus visiones o trabajando con otras monjas, reflejan su extraordinaria creatividad y profundidad espiritual.

Las mujeres incluso después de todas estas barreras a las que las sometieron, encontraron de una forma o otra la forma de volverse personas letradas, y sabias, otro ejemplo de esto, y también una monja es Juana Inés de la Cruz, quien tambien fue conocida como "la Décima Musa," fue una destacada escritora, poetisa y filósofa mexicana del período colonial. Su obra abarca poesía, teatro, ensayos y cartas, y es considerada una de las figuras más importantes del Siglo de Oro en la literatura hispanoamericana. No solo esto, si no que tambien escribio:

  • Sobre la desigualdad de genero,
"Hombres necios que acusáis a la mujer sin razón, sin ver que sois la ocasión de lo mismo que culpáis."
  • Sobre el conocimiento y la libertad:
"No estudio para saber más, sino para ignorar menos."

  • Sobre la naturaleza efímera de la belleza:
"Es cadáver, es polvo, es sombra, es nada."

  • Sobre la razón y el alma:
"Qué obren el alma y la razón es bien, pero que obren solo el alma, es mejor."

  • Sobre el deseo de aprender:
"Si Aristóteles hubiera guisado, mucho más habría escrito."

  • Sobre el amor y la pasión:
"El amor no es amor porque se ame lo amado, sino porque siendo amor, ame aún lo no amado."

  • Sobre la vanidad humana:
"El que alaba al que no merece, alaba al que se le parece."

  • Sobre la inteligencia femenina:

"¿Quién podrá impedir que aprenda, siendo el alma inmortal y el entendimiento infinito?".


"La ausencia de las mujeres de las historias «oficiales» de la filosofía, que Celia Amorós ha caracterizado como «razones de los olvidos de la razón», se sustentan en una concepción sesgada de su historia, de modo que solo fragmentariamente y tras ardua indagación bibliográfica, llegamos a saber que existieron filósofas y pensadoras que propusieron, comentaron, dialogaron y examinaron críticamente las obras de los filósofos varones de su época. Entre ellas, Lucrezia Marinella, Marie de Jars de Gournay, Anna Maria von Schurman, Margaret Cavendish, Marie Winckelmann von Kirch, Anne Finch Conway o Émilie du Châtelet"

Anne Finch Conway, conocida como la "Condesa Olvidada," fue una filósofa atípica del siglo XVII cuya vida y obra son fascinantes. Su historia refleja tanto los obstáculos que enfrentaban las mujeres de su época para acceder a la educación formal como su determinación por desarrollar un pensamiento profundo y original. A pesar de no haber recibido la formación académica tradicional reservada para hombres como Descartes o Locke, Anne logró una sólida base intelectual gracias a su hermano John, quien compartía con ella los debates filosóficos que aprendía de su preceptor, Henry More. Este último también fue una figura clave en su educación, introduciéndola en la filosofía de Aristóteles, Plotino, Descartes, y el humanismo inglés.

Desde temprana edad, Anne padeció una enfermedad que le provocaba constantes dolores de cabeza, lo cual la llevó a buscar alivio no solo a través de los médicos más destacados de su tiempo, sino también mediante reflexiones filosóficas sobre el cuerpo y el alma. Estas experiencias influyeron profundamente en su obra, en la que rechazó el dualismo cartesiano y propuso una conexión intrínseca entre ambos.

En su único libro, The Principles of the Most Ancient and Modern Philosophy, Anne aborda temas de metafísica y teología con una perspectiva innovadora, integrando elementos de la filosofía clásica, el vitalismo y el mecanicismo moderno, sin perder de vista su fe cristiana. En este sistema, plantea una jerarquía ontológica donde Dios, Cristo y las criaturas forman un continuo, negando la existencia de cuerpos inertes y afirmando que toda la creación está viva.

Su contacto con figuras intelectuales como Francis Mercury van Helmont y su interés por la Kabala cristiana también enriquecieron su pensamiento. Anne exploró cómo el dolor puede ser un vehículo para el crecimiento moral y espiritual, una idea que reflejó en sus escritos al sostener que, aunque el sufrimiento aumenta, también lo hace la comprensión.

Anne Conway fue una pensadora compleja que, a pesar de los límites impuestos por su tiempo, dejó un legado filosófico profundo y adelantado a su época, aunque su obra solo haya sido valorada plenamente mucho después de su muerte.

Estas son solo unas pocas mujeres interesadas en la filosofía, misma que decidió dejarlas en el olvido, por tanto lo invito a usted que me lee a buscar alguna de sus obras, obras repletas de pasión, sabiduría, y silencio, silencio al que fueron sometidas por años y sin razón alguna.

Índice


  1. Introducción

    • La invisibilización de la mujer a través de la historia.
    • Por qué es importante para mi hablar de este tema hoy.
  2. Mujeres y la filosofía

    • Cómo Aristóteles describió a la mujer en su pensamiento.
    • La influencia de estas ideas en la percepción histórica de la mujer.
  3. Mujeres en el arte y la escritura

    • Autoras que publicaron libros de manera anónima.
    • El impacto de esta invisibilidad en la literatura y el arte.
  4. Mujeres en los avances científicos y tecnológicos

    • Ejemplos de mujeres que transformaron la ciencia pero fueron ignoradas.
    • El impacto de su trabajo en la tecnología moderna.
  5. Mujeres en los derechos

    • El caso de la mujer que participó activamente en la Revolución Francesa y fue ahorcada.
    • El rol de las mujeres en la lucha por los derechos humanos.
  6. Mujeres en la guerra

    • La participación de las mujeres en conflictos bélicos.
    • Cómo sus historias han sido minimizadas o borradas de los registros históricos.
  7. Conclusión

    • Reflexión sobre la importancia de reconocer las contribuciones de las mujeres.
    • Cómo podemos trabajar para darles un lugar justo en la historia.

Conclusión

"La mujer es la primera y más grande guerrera, pero su batalla siempre ha sido luchada en las sombras."  – Maya Angelou. Sin duda ...