miércoles, 20 de noviembre de 2024

"La guerra no tiene rostro de mujer"

“La historia está escrita por los vencedores, pero también por los hombres. Y las mujeres, que han luchado a lo largo de la historia, no son sino las olvidadas en sus relatos”

-Virginia Woolf

Me frustra profundamente pensar en cómo las mujeres han estado involucradas en las guerras, luchando, sufriendo, sacrificándose, pero su historia ha sido minimizada o completamente borrada ¿Cómo puede ser que, a lo largo de la historia, sus contribuciones se hayan ignorado de manera tan descarada? Las mujeres no solo han estado al margen de la guerra, como si solo fueran víctimas de los conflictos, sino que han sido activas, han luchado, han sido guerreras, espías, enfermeras, lideresas... y, sin embargo, se las ha reducido a un papel secundario, casi invisible, como si su sufrimiento y valentía no tuvieran el mismo valor que el de los hombres. Y no es que esta invisibilización sea algo del pasado, es algo que sigue sucediendo hoy.

Mujeres como Charlotte Corday, por ejemplo, que se infiltró en las filas revolucionarias en Francia durante la Revolución Francesa y asesinó a Jean-Paul Marat, un líder radical, con la esperanza de acabar con la violencia. Su acto, aunque discutido, fue una intervención radical, de gran valentía, pero ¿quién recuerda su nombre hoy en día? ¿Cuántas veces hemos oído hablar de ella en comparación con los grandes nombres de la Revolución? ¡Es tan injusto! El sacrificio y las decisiones que tomaron esas mujeres no están siquiera en las mismas páginas de los libros de historia. Las mujeres no solo estuvieron en casa esperando a que los hombres volvieran; muchas estuvieron en el campo de batalla, ocultas en las sombras de la historia.

Otra figura clave es Lyudmila Pavlichenko, la famosa francotiradora soviética que luchó en la Segunda Guerra Mundial. ¿Cómo es posible que no se haya dado el reconocimiento que merece? Lyudmila fue una de las francotiradoras más exitosas de la historia, con 309 muertes confirmadas, pero ¿cuántas veces hemos oído hablar de ella en comparación con otros héroes de guerra masculinos? Es como si sus hazañas se minimizaran, como si el hecho de ser mujer hiciera que su valentía no tuviera el mismo peso. Es un reflejo de una sociedad que aún no está dispuesta a reconocer el impacto real de las mujeres en la historia, especialmente en los momentos más cruciales.

Y luego están las mujeres que fueron utilizadas como armas de guerra, como las mujeres de confort durante la Segunda Guerra Mundial, que fueron forzadas a servir a los soldados japoneses en campos de prostitución militar. A estas mujeres se les robó su dignidad, su libertad, y se las condenó a vivir una pesadilla indescriptible. Muchas de ellas fueron completamente ignoradas, como si sus cuerpos no tuvieran valor, como si su sufrimiento no fuera tan importante como el de los hombres que peleaban en el frente. Lo peor es que ni siquiera fue hasta mucho tiempo después que las voces de algunas de estas mujeres comenzaron a ser escuchadas, aunque la justicia nunca llegó completamente. Es tan doloroso y tan profundamente injusto.

Y, ¿qué pasa con las mujeres que fueron espías? Mata Hari, por ejemplo, es una de las figuras más famosas en este campo. Fue una bailarina exótica y espía durante la Primera Guerra Mundial, y, aunque sus logros fueron impresionantes, su historia ha sido constantemente distorsionada y usada en su contra. Su imagen ha sido desfigurada en la cultura popular, reducida a una femme fatale, sin un reconocimiento real de sus contribuciones en la guerra. Es increíble cómo se las utiliza para cumplir con ciertos estereotipos, sin darles el crédito que merecen.

Pensar en el como los historiadores por siglos decidieron borrarlas de la historia, y como aun puede que haya habido muchísimas mas que ellos decidieron ignorar es algo realmente frustrante, y es que si, las mujeres han estado allí, en todas las guerras, no solo como víctimas, sino como fuerzas activas que influenciaron el curso de los acontecimientos. Pero sus historias han sido borradas, minimizadas y, en muchos casos, nunca se les ha dado el reconocimiento que deberían haber recibido.

Este patrón de invisibilización no solo es frustrante, es un reflejo de una sociedad, sociedad que en cada una de las veces que he hablado acerca de los derechos de la mujer y el como la historia decide dejarlas en el olvido, me repite que: "Seguro no hicieron nada importante y por eso no es relevante hablar de ellas". 

Es una gran injusticia que debe ser reconocida y corregida, la historia de la guerra no puede ser completa sin las historias de las mujeres que estuvieron allí, luchando, resistiendo, sobrevivendo y, a menudo, sacrificándose mucho más de lo que nos imaginamos.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Conclusión

"La mujer es la primera y más grande guerrera, pero su batalla siempre ha sido luchada en las sombras."  – Maya Angelou. Sin duda ...